FANFIC Sentimiento oculto. [NAO Y NATSUKI] SEXTO CAPITULO

FANFIC Sentimiento oculto. [NAO Y NATSUKI] SEXTO CAPITULO

Sentimiento oculto. ¡sex!-to capitulo?

Capítulo 6.

Al ver que si hay un comentario, creo que decidiré a contarles la otra parte del gran espectáculo que estábamos montando.

Mas sin embargo creo es mi turno-dice Nao, mientras Natsuki se queda boquiabierta y enojada-Por si fuera poco, ya estábamos como agua para chocolate, o sea en el máximo esplendor sensual posible.

En mi caso la verdad, es que, me da pena decirlo, y todavía frente a la cachorrita Kuga, pero realmente había perdido la noción del espacio tiempo, pero ya no me importaba nada.

No le conocía esos dotes a Kuga, además que no se cómo paso, pero a medida que me hacia estar en el aire, con cada orgasmo que sentía, yo también le proporcionaba placer, pues me daba rabia que ella solo se dedicara a hacerme reventar de pasión, así que las dos, continuamos con ese ritual sensual.

Aunque Tokiha Mai no se quedaba atrás, pues ella, estaba disfrutando de la parte trasera de la loba solitaria.

Había puesto dos dedos en el agujero estrello de la chica de cabello cobalto, no sé porque pero comencé a sentir celos, mas sin embargo, creo que será mejor enfocarme en las niñas de esta chica de cabello azul, que están en un vaivén en dirección adelante y atrás.

Así que la acción por los celos, no sería montar una escenita y de paso declararle mi amor a Kuga, por el contrario, creo que se lo desmostraria sutilmente de la siguiente forma:

Toma los senos de Kuga, y los acaricie con la yema de mis dedos, tan despacio que apenas sintiera el roce, de mis dedos con sus tetas, su respiración se hizo tan audible, al principio fue de forma pausada, como disfrutando de las caricias que le daba, así que al pasar unos minutos; comencé a masajearlas, y a tocarlas con mis manos, realmente es una sensación hermosa, ella continuaba dándome placer a través de mi vagina con el dedo de su mano izquierda, mientras que con la derecha se masturbaba, tratando de sentir la misma sensación que yo.

Los jadeos y quejidos de las tres, se sincronizaron, y realmente era una bella tonada la de las tres, de verdad estamos regocijandonos en nuestra pasión.

Mientra Mai seguía penetrando el recto de Kuga, ella también se daba gozando a sí misma, parece que eso le agradaba hacer, debido a que le vi muy entregada a esa acción, deduci, que ese era su fetiche, sonreí porque ya seria en otra ocasión donde sabría darle rienda suelta a esa extraña inclinación deleitable, a pesar de esto, creo que también resulto excitante, asi que comenze a acariciar los pezones de las niñas de Natsuki, mientras ella jadeaba y me decía al odio:

-Nao, eso…se siente…rico…no….pares.

Le sonreí y también me acerque a susurrarle a su oído.

-Sabes esto es solo el princio, Nat-su-ki y le lamí todo su oído, haciendo que ella se sobre saltara y gimiera.

Debido a esto sentí la necesidad de prologarnos más placer así que le abrace, haciendo que nuestros senos quedasen juntos y nuestros pezones se tocaran, allí fue el climax de la melodía de los pujidos, mientras Mai incrementaba el ritmo de su masturbación, haciendo que se corriera en el culito de mi querida Kuga, cosa que resulto realmente provechosa, pues con eso era suficiente lubricante como para comenzar a darnos más sensaciones ricas.

Así que decidí culminar este acto de una manera profesional y digna de una amante.

Bese en los labios a esa chica de cabello cobalto, mientras le empuje suavemente hacia atrás, de manera que quedo con las piernas abiertas, yo al ver tal panorama no me resistí y me acerque hacia esa zona.

Mas sin embargo también acerque mi rajita hacia la muchacha de verde mirar.

Luego que admire su rajadita, se la bese y la lamí con la punta de la lengua para sacar más de su miel.

El festín es delicioso, y ella hacía lo mismo conmigo.

Mai no paraba de dedearse, ¡aun tenía ganas de mas sexo!.

Ahora no podía ser mejor, esto era algo que jamás habría imaginado, hacerle el amor a aquella chica que me cautivo desde el primer instante que le vi.

Todo giraba en torno a nuestros gritos de este rito voluptuoso.

Se me hace tarde, creo que es suficiente por hoy, te dejo en mas suspenso y creo que te has entretenido bastante.

¡Sayonara!